Información para pacientes

Información para pacientes

Aprende cuales son algunas complicaciones postoperatorias frecuentes y como prevenirlas.

Delirium

Estado agudo de confusión mental que causa cambios rápidos en la cognición y el comportamiento. Se caracteriza por desorientación, alucinaciones, y fluctuaciones en el nivel de conciencia.

Trombosis venosa profunda

Formación de un coágulo sanguíneo en una vena profunda del cuerpo, generalmente en las piernas. Este coágulo puede obstruir el flujo sanguíneo y, en casos graves, puede desprenderse y viajar a los pulmones.

Infecciones postoperatorias

Aparición de una infección después de una intervención quirúrgica, donde los patógenos pueden ingresar al cuerpo durante o después de la operación o a través de la herida quirúrgica.

Parálisis intestinal

Los movimientos normales del intestino delgado se ven inhibidos temporalmente después de una cirugía, lo que puede provocar distensión abdominal, náuseas y vómitos.

Insuficiencia respiratoria

 Los pulmones no pueden suministrar suficiente oxígeno al cuerpo o eliminar adecuadamente el dióxido de carbono después de una intervención quirúrgica.

Deterioro funcional

Pérdida temporal de la capacidad física después de una cirugía, lo que puede manifestarse como debilidad muscular, disminución de la movilidad, o dificultades para realizar actividades de la vida diaria.

Preguntas frecuentes

Las complicaciones pueden variar según el tipo de cirugía, pero algunas comunes incluyen infección, sangrado excesivo, coágulos sanguíneos, problemas de cicatrización de heridas y reacciones adversas a la anestesia.

El equipo médico está preparado para identificar y tratar cualquier complicación que pueda surgir. Esto puede implicar medicamentos, procedimientos adicionales o incluso cirugía de emergencia en casos graves.

La duración de las complicaciones varía según su naturaleza y gravedad. Algunas pueden resolverse en días o semanas con tratamiento adecuado, mientras que otras pueden requerir un seguimiento a más largo plazo.

Si experimentas síntomas preocupantes, como fiebre alta, dolor intenso, sangrado abundante o dificultad para respirar, debes comunicarte de inmediato con tu médico o buscar atención médica de emergencia.

Sí, factores como la edad, el estado de salud general, las condiciones médicas preexistentes y el cumplimiento con las instrucciones postoperatorias pueden influir en el riesgo de complicaciones.

Seguir las instrucciones pre y postoperatorias de tu equipo médico es fundamental. Esto puede incluir tomar ciertos medicamentos, evitar ciertas actividades o mantener ciertos cuidados en la herida.

Sí, es importante estar atento a signos como fiebre persistente, enrojecimiento, hinchazón o secreción en la herida, dificultad para respirar, dolor repentino o cualquier otro síntoma inusual.

Por lo general, se programarán citas de seguimiento después de la cirugía para evaluar tu progreso y detectar cualquier complicación temprana. Sin embargo, si experimentas síntomas preocupantes entre estas citas, no dudes en comunicarte con tu médico de inmediato.